sábado, 14 de julio de 2012

Unravel

(haciendo un ovillo con el día de hoy, la canción de Björk y la frase de Sergio: "la espuma de los días")

Cierto, hoy estaba más sensible. Mucho más de lo normal.
Y la sensación, subyaciendo todo el rato, de que era un estado superior, más lúcido y humano que nunca. De que lo que podría resultar una debilidad, lo fuera o no, impulsaba cada una de mis respiraciones. Como el latido al que estoy acostumbrado, constante e indescriptiblemente, así durante todo el día de hoy.

Qué maravilla, qué lujo, qué suerte.
Quiero más. Aunque me mate.
Aunque mis entrañas se deshilachen en el proceso.
Aunque se marche tan grácilmente como llegó
la espuma de mis días.